Analgésicos para adolescentes: cuando el ibuprofeno y compañía se convierten en un riesgo

¿Es cierto que muchos jóvenes recurren sin cuidado a analgésicos de venta libre?
Sí. Muchos jóvenes tienen conocimientos limitados sobre los analgésicos y sus riesgos. Los dolores de cabeza son una de las quejas más comunes en este grupo de edad. Los jóvenes quieren mantenerse productivos, tanto en la escuela como en los deportes. Cuando descubren que una pastilla puede aliviar el dolor rápidamente, se descuidan rápidamente. Además, los analgésicos están disponibles gratuitamente en todas las farmacias, se encuentran en los botiquines de los padres, son baratos y aparentemente inofensivos. Sin embargo, muchos jóvenes desconocen que todos los medicamentos, incluso los de venta libre, conllevan efectos secundarios y riesgos.
¿Existen cifras al respecto?
Gracias a nuestros propios estudios en escuelas, sabemos que más de la mitad de los adolescentes sufren dolores de cabeza con regularidad. Por ello, recurren con frecuencia a la medicación. El estudio KiGGS del Instituto Robert Koch muestra que aproximadamente una cuarta parte de los niños y adolescentes tomaron medicación para automedicarse durante la semana anterior a la encuesta, principalmente medicamentos de venta libre. Otras encuestas entre adolescentes muestran que alrededor del 40 % de quienes sufren dolores de cabeza recurrentes usan analgésicos con regularidad. Por lo tanto, el uso de analgésicos de venta libre entre los adolescentes está muy extendido.

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¿Cuál de estos es el más popular entre los jóvenes?
Claramente, el ibuprofeno ocupa el primer lugar. Se considera de acción rápida, económico y disponible en casi cualquier botiquín. El paracetamol también se consume con frecuencia. El ácido acetilsalicílico tiene un papel menor entre los adolescentes. También se utilizan diversas preparaciones combinadas que contienen cafeína. La principal razón para su selección suele ser la publicidad, más que los datos científicos.
¿Debería entonces prohibirse la publicidad de analgésicos?
Depende del tipo de publicidad. Si proporciona información adecuada sobre el uso correcto de los analgésicos, puede ser útil. Sin embargo, si la publicidad crea la impresión de que una pastilla es la solución rápida y fácil a todos los problemas, es problemático. Fomenta un comportamiento del consumidor que puede llevar a un uso descuidado. Los medicamentos no son productos de estilo de vida, sino medicamentos con riesgos potenciales.
¿Para qué sirven estos analgésicos?
Por un lado, pueden presentarse efectos secundarios agudos, como malestar estomacal, irritación de la mucosa gástrica o, en caso de sobredosis, daño hepático o renal. Por otro lado, el uso frecuente conlleva el riesgo de cronicidad: si se toman analgésicos con demasiada frecuencia durante un período prolongado, se puede desarrollar lo que se conoce como cefalea por abuso de medicamentos. Esto significa que los medicamentos que se supone que ayudan se convierten en la causa de nuevas cefaleas diarias. Este es un círculo vicioso que, lamentablemente, observamos con mucha frecuencia en la medicina del dolor.
¿Qué pasa con los riesgos a largo plazo? ¿Los adolescentes que usan analgésicos sin cuidado también tienen más probabilidades de abusar de los medicamentos o consumir drogas?
Lamentablemente, sí. Los estudios demuestran que el uso temprano e indiscriminado de medicamentos aumenta el riesgo de ser menos cauteloso con otras sustancias más adelante. Esto no significa que todos los adolescentes que toman analgésicos estén automáticamente en riesgo. Pero la falta de sensibilidad al peligro es un denominador común. Los adolescentes que tienen la impresión de que "una pastilla resolverá mi problema inmediatamente" también pueden ser más propensos a buscar soluciones rápidas con otras sustancias.

¿Cuál de los analgésicos de venta libre presenta mayores riesgos?
Cada uno de estos medicamentos puede ser peligroso si se usa incorrectamente o con demasiada frecuencia. Las cefaleas por abuso de medicamentos son más probables al tomar medicamentos combinados, especialmente si también contienen cafeína. El paracetamol también es crucial: una sobredosis de incluso unas pocas tabletas puede provocar daño hepático grave. El ibuprofeno y la aspirina también pueden ser peligrosos si se usan incorrectamente, por ejemplo, debido a una hemorragia estomacal o daño renal. Es importante recordar que ningún analgésico es inocuo. Estos medicamentos afectan el cuerpo. La dosis correcta y la razón correcta siempre son cruciales.
Tomar un analgésico de este tipo por tu cuenta de vez en cuando no supone ningún problema. ¿Cuándo se convierte en una preocupación?
La llamada regla 10-20 es una sencilla regla general para prevenir las cefaleas por abuso de medicamentos. Establece que no se deben usar analgésicos más de diez días al mes. Esto significa que se debe poder prescindir de cualquier medicamento agudo durante al menos 20 días al mes. Si se exceden estos límites, el riesgo de que el medicamento provoque nuevas cefaleas aumenta significativamente. Lo complicado es que muchos pacientes no se dan cuenta inicialmente de que los propios medicamentos se han convertido en la causa. Por eso es tan importante la regla 10-20, ya que proporciona una guía clara.
¿Deben los padres enseñar a sus hijos a soportar el dolor?
No se trata de soportar el dolor, sino de tomárselo en serio. Es una señal de alerta del cuerpo y siempre debe cuestionarse. Los padres deben decirles a sus hijos: si experimentan dolor con frecuencia, es importante investigar la causa. Los medicamentos para casos agudos por sí solos no son una solución diaria. La negligencia de muchos jóvenes se relaciona con su falta de experiencia sobre los posibles peligros. Es necesaria la educación en este sentido: por parte de los padres, las escuelas, las farmacias e incluso los médicos. También existen muchas opciones no farmacológicas para aliviar o prevenir el dolor. Las medidas conductuales también pueden ayudar a superar los síntomas.
Por favor, dame un ejemplo.
Para los dolores de cabeza leves, medidas sencillas suelen ser útiles: aire fresco, abundante líquido, ejercicio, técnicas de relajación y un descanso del trabajo con pantallas. Dormir bien y llevar una dieta saludable también son cruciales.
¿Y cuándo debes acudir al médico?
Si los dolores de cabeza ocurren con frecuencia, es decir, varias veces al mes, si son particularmente severos o si aparecen síntomas adicionales, como alteraciones visuales, mareos o anomalías neurológicas, entonces es absolutamente necesaria una evaluación médica para determinar la causa e iniciar un tratamiento específico.
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