Ayuda a regenerar el hígado: ¿Cuándo consumirlo?


En algunas regiones, en particular Estados Unidos y el Sudeste Asiático, esta tasa supera el 40 %. Esta enfermedad, que se desarrolla independientemente del consumo excesivo de alcohol, suele asociarse con la obesidad, la diabetes tipo 2 y el síndrome metabólico.

Se ha sugerido que los recursos naturales pueden utilizarse para combatir la EHGNA, que a menudo se describe como una "epidemia silenciosa" debido a su ausencia de síntomas en las primeras etapas. Las investigaciones sugieren que el consumo regular de frutos secos, en particular nueces, almendras, pistachos, pecanas y nueces de Brasil, puede tener efectos positivos en la salud hepática.

Un estudio de 2020 reveló que el consumo de frutos secos mejoraba los factores de riesgo cardiometabólicos asociados con la EHGNA, como la diabetes, la obesidad y la dislipidemia. Un amplio análisis de cohortes también reveló que consumir cuatro o más frutos secos a la semana reducía el riesgo de EHGNA en aproximadamente un 20 %. Los expertos señalan que los frutos secos pueden favorecer la función hepática, reducir la inflamación y combatir la acumulación de grasa gracias a sus ácidos grasos insaturados, fibra, antioxidantes, vitaminas y minerales.

Gracias a sus ácidos grasos omega-3 y a su potente contenido antioxidante, las nueces se encuentran entre los frutos secos que más contribuyen a la salud hepática. Un estudio sobre la dieta mediterránea de 2021 demostró que el consumo diario de nueces reduce significativamente el hígado graso. Se recomienda consumirlas por la mañana o antes de acostarse.

Ricas en vitamina E, fibra y grasas monoinsaturadas, las almendras favorecen el metabolismo de las grasas en el hígado al reducir el estrés oxidativo. Su consumo regular se ha relacionado con la reducción del colesterol LDL y el control del azúcar en sangre. Se recomienda consumir almendras especialmente por la mañana.

Los pistachos, con su alto contenido en antioxidantes, pueden proteger el hígado al influir en los genes que regulan el metabolismo lipídico. Se recomiendan como fuente de energía antes o después del entrenamiento; también pueden mejorar la calidad del sueño si se consumen con magnesio. Es fundamental consultar con un experto antes de realizar cualquier cambio en los hábitos alimenticios. Si bien los frutos secos son beneficiosos para la salud en general, el estado de salud y las necesidades de cada persona pueden variar. La información de este artículo es solo para fines informativos. Para el diagnóstico y el tratamiento, siempre se debe consultar a un médico o dietista.
ntv