Cáncer y prevención, la ayuda viene de estos alimentos

Adoptar un estilo de vida saludable es una de las maneras en que podemos proteger nuestra salud. Seguir una dieta equilibrada y saludable, junto con mantenerse físicamente activo y evitar el tabaco y el alcohol, es una de las recomendaciones que los oncólogos (y otros) llevan años repitiendo. Pero ¿cuáles son los alimentos que ayudan a prevenir el cáncer? Un grupo de expertos del Programa Global de Actualización sobre Cáncer —la red del Fondo Mundial para la Investigación del Cáncer que analiza la investigación global sobre cómo la dieta, la actividad física y el estilo de vida influyen en el riesgo y la supervivencia al cáncer— ha examinado recientemente numerosos estudios sobre el cáncer colorrectal y de mama. Veamos qué indicaciones se desprenden del informe .

Alimentos que son amigos de la prevención

El panel examinó un total de 170 estudios, incluidos 86 sobre cáncer colorrectal y 84 sobre cáncer de mama. En primer lugar, los autores enfatizan la importancia de no centrarse en alimentos o comportamientos individuales, sino en tener una visión global.

En cuanto a los detalles de las recomendaciones, la mayoría incluye la prevención tanto del cáncer colorrectal como del cáncer de mama. Por ejemplo, se recomienda favorecer el consumo de verduras y frutas, y en general, de alimentos ricos en fibra, como cereales integrales, legumbres y frutos secos. «Es especialmente importante consumir frutas y verduras de temporada —subraya Saverio Cinieri , presidente de la Fundación Aiom—. Esto se debe a que las frutas y verduras de otras partes del mundo, cuando no es temporada en nuestras latitudes, suelen conservarse con agentes antifúngicos y antibacterianos, lo cual, sin duda, no es beneficioso para la salud».

Alimentos que debemos evitar o limitar

También es necesario evitar el consumo de carnes procesadas y reducir el de carnes rojas y bebidas muy azucaradas, explica Cinieri. Añade: «Estas indicaciones también pueden extenderse a la prevención de muchos otros tipos de cáncer, además del de las enfermedades cardiovasculares, y confirman ampliamente el conocimiento acumulado a lo largo del tiempo sobre este tema». Lo interesante es que la confirmación no proviene de un único estudio, sino, como se preveía, del análisis de una gran cantidad de investigaciones publicadas hasta la fecha.

Café y calcio: ¿protectores para el colon?

Otro aspecto, quizás poco conocido, es que, específicamente para la prevención del cáncer colorrectal, los autores sugieren el consumo de café y alimentos y bebidas que contengan calcio, como la leche y los productos lácteos en general. Sin embargo, es importante recordar que muchos alimentos vegetales también contienen buenas dosis de calcio, como la col negra, las semillas de sésamo, la soja y las almendras. El mecanismo protector que parecen tener este tipo de bebidas o alimentos no se ha esclarecido por completo.

Los autores de un estudio reciente publicado en Nature Communication plantean, por ejemplo, la hipótesis de que el calcio puede unirse a los ácidos biliares y los ácidos grasos libres presentes en el intestino, promoviendo su expulsión y previniendo el daño a las paredes intestinales que podría resultar de su acumulación. «Por otro lado, en lo que respecta al café —especifica Cinieri—, existen numerosos estudios al respecto, pero el posible mecanismo de acción no está claro por el momento. Por lo tanto, no conviene exagerar».

Adaptar las indicaciones según la región

Finalmente, el informe destaca la importancia de adaptar las recomendaciones dietéticas a las diferentes necesidades culturales y religiosas, así como a la disponibilidad de alimentos según la zona geográfica de interés. Los autores concluyen que, de hecho, las recomendaciones solo se adoptarán si la gente las percibe como culturalmente aceptables. «Por esta razón», afirma el informe, «nos hemos esforzado por garantizar que las recomendaciones no sean prescriptivas, sino que puedan adaptarse para incluir alimentos disponibles a nivel mundial».

Hay un último precepto a tener en cuenta: lo que marca la diferencia es mantener el mayor número posible de comportamientos virtuosos: «Ante todo, hay que evitar el tabaco y el alcohol —concluye Cinieri—. Sobre el alcohol, en particular, se ha hablado mucho desde hace tiempo, sobre todo de que no existe una dosis segura y, por lo tanto, se considera absolutamente cancerígeno».