Esto es lo que hay que hacer si los dedos de tu hijo se montan, según una podóloga infantil

Los pies son fundamentales en la movilidad y el crecimiento de los pequeños, por lo que mantenerlos en buen estado y vigilar posibles malformaciones antes de que llegue el desarrollo puede ser de vital importancia y evitar males mayores. Uno de esos problemas tiene que ver con los dedos que se montan, impidiendo su alineación natural 'normal'.
Así pues, la clinodactilia (dedos torcidos en los pies) es una condición más o menos común en los más pequeños, que puede tener diversas causas y que, si se coge a tiempo (antes de los 4 años de edad) tienen una solución muy sencilla que puedes llevar a cabo en casa. En este sentido, la podóloga Neus Moya publica un vídeo en sus redes sociales en el que ofrece los consejos útiles para corregir este problema del pie.
Qué es la clinodactilia, y cómo afecta a los dedos del pieLa clinodactilia, conocida coloquialmente como dedos torcidos o desviados, hace referencia a la deformación de uno o varios dedos con una desviación anómala respecto a la alineación del resto. Aunque no es habitual que este problema de los dedos de los pies curse con dolor, conviene conocer las causas y síntomas para saber qué posibles tratamientos tiene, y hasta qué punto pueden corregirse de una forma sencilla.
Esta malformación en los pies es habitual entre la población adulta, pero mucho más en los niños, siendo el dedo más prevalente en cuanto a deformidad el segundo. La clinodactilia afecta a ambos sexos por igual, aunque predomina más en mujeres debido al uso excesivo de zapatos con puntas estrechas y tacones.
Al tratarse fundamentalmente de un problema estético, estos 'dedos montados o torcidos' sí pueden molestar al caminar, cuando el calzado oprime y nos impide llevar a cabo ciertos movimientos con el pie. Lo ideal es consultar con un podólogo y, una vez tengamos el diagnóstico, actuar cuanto antes para intentar que no vaya a más.
Cómo hacer un primer autodiagnóstico en casa, según la podóloga Neus MoyaSi observamos los dedos del pie de nuestro hijo, y han perdido la alineación natural, montándose unos por encima o por debajo del resto, la podóloga infantil Neus Moya sugiere llevar a cabo un sencillo ejercicio, para descartar que se trate de un problema a tratar.
Sabremos si hay que actuar, cuando la posición de los dedos de los pies es diferente estado sentados o de pie. Según la experta, "si vemos unos dedos montados, pero al apoyar el pie el peque en el suelo, cada dedo recupera su lugar y se colocan en línea, entonces todo está bien. Sin embargo, si cuando está de pie o caminando, los dedos siguen montados, entonces sí debemos tratarlos".
Cuando el niño tiene menos de 4 años, la podóloga aconseja "hacer un vendaje en forma de omega con esparadrapo elástico, con el objetivo de alinear cada dedo. El esparadrapo debe permanecer colocado durante todo el día. En caso de que el niño sea mayor de 4 años, realizamos una ortesis de silicona a medida". Y añade un consejo muy importante para finalizar: "Si el peque lleva zapatos de puntera estrecha, hay que cambiarlos por unos de puntera anatómica porque si no, cualquier tratamiento será inútil".
20minutos