Una buena señal en sí misma: toser al comer helado: un otorrinolaringólogo explica por qué ocurre.
Cuando brilla el sol y suben las temperaturas, para muchos, el siguiente paso lógico es darse el gusto de comer helado. Es simplemente molesto tener que toser constantemente mientras se come helado. ¿Por qué, exactamente?
Toser es un mecanismo natural del cuerpo. Cuando estamos resfriados, el cuerpo intenta eliminar la mucosidad. Si nos atragantamos, nos liberamos del cuerpo extraño. Pero ¿por qué a veces tosemos al comer helado?
"La tos se desencadena por estímulos muy fuertes, como cuerpos extraños o fluctuaciones de temperatura", explica Bernhard Junge-Hülsing, otorrinolaringólogo de Starnberg.
El cuerpo reacciona al frío intenso del hielo con un arco reflejo que se transmite a través de los nervios deglutorios y los vasos sanguíneos. En concreto, esto significa que los nervios informan de un estímulo y los vasos sanguíneos reaccionan contrayéndose.
"Y el cuerpo reacciona", dice Bernhard Junge-Hülsing. Reacciona con tos, por ejemplo. O: "Lo que mucha gente también conoce es una constricción de los vasos sanguíneos en la cabeza, que repentinamente causa un fuerte dolor de cabeza". Este dolor de cabeza frío también se conoce coloquialmente como "congelación cerebral".
Si tiene tos al comer helado, no hay motivo de preocupación. Al contrario, es señal de que su inervación es buena y sus reflejos funcionan, según el otorrinolaringólogo. Es simplemente la advertencia de su cuerpo de que está comiendo demasiado rápido y de forma frenética.
La tos, y también el dolor de cabeza, se pueden evitar disfrutando del helado más despacio. «Come trozos pequeños o lame el helado en lugar de morder un trozo grande», aconseja Junge-Hülsing. Esto le da tiempo al cuerpo para adaptarse al frío.
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