Sería señal temprana de psicosis

NUEVA YORK (HealthDay News).— “Sostente” podría ser una expresión más cierta para aferrarse a la cordura de lo que se pensaba antes, según un estudio reciente.
Una pérdida de fuerza de agarre sería un signo temprano de psicosis, informan investigadores en el “American Journal of Psychiatry”. Las personas recientemente diagnosticadas con psicosis tienen una fuerza de agarre más débil en comparación con gente con buena salud mental y física.
“Una fuerza de agarre deficiente se ha asociado con muchos resultados negativos en una variedad de personas: un bienestar más bajo, un riesgo más alto de mortalidad, un funcionamiento diario deficiente y una calidad de vida deficiente”, señaló la investigadora principal, Alexandra Moussa-Tooks, profesora de ciencias psicológicas y cerebrales de la Universidad de Indiana.
“La fuerza de agarre parece capturar que las cosas no van bien, pero no se ha estudiado bien en relación con la función cerebral o la psicosis temprana”.
La psicosis con frecuencia comienza con alteraciones en la forma en que las personas mueven sus cuerpos, antes de progresar a delirios como paranoia o alucinaciones, apuntaron expertos.
En el nuevo estudio, los científicos compararon a 89 personas diagnosticadas con psicosis en los últimos cinco años con 51 sanas.
Las personas con psicosis tenían una fuerza de agarre más baja y puntuaron peor en las evaluaciones de bienestar en comparación con el grupo de control.
Los escáneres cerebrales mostraron que estos problemas estaban relacionados con tres regiones clave del cerebro conectadas a la red de modo predeterminado, un sistema cerebral que se activa cuando las personas están soñando despiertas o no están concentradas en ninguna tarea en particular.
Una mayor fuerza de agarre y un mayor bienestar se asociaron con una mayor conectividad entre las tres regiones del cerebro: la corteza cingulada anterior, la corteza sensoriomotora y el cerebelo.
Estos resultados sugieren que el deterioro en la fuerza de agarre podría reflejar cambios en lo que los investigadores llaman “conectividad funcional en estado de reposo”, medida de la función de la red cerebral.
“Nuestros hallazgos son particularmente emocionantes porque identifican objetivos cerebrales potenciales para nuevos tratamientos para la psicosis”, señaló la doctora Heather Burrell Ward, profesora asistente de psiquiatría y ciencias conductuales del Centro Médico de la Universidad de Vanderbilt en Nashville, Tennessee.
Por ejemplo, la estimulación magnética podría usarse para aumentar esa conectividad. Otro enfoque implicaría el ejercicio físico, que fortalecería indirectamente las redes cerebrales.
“Si la psicosis es una casa en llamas, los síntomas como los delirios y las alucinaciones son el humo”, explicó Moussa-Tooks. “En un incendio no se ataca el humo, sino el fuego y su fuente. Y, sin embargo, actualmente no es así como abordamos el tratamiento de la psicosis”.
Dijo que las perturbaciones motoras ayudan a los investigadores a identificar dónde pudo haber comenzado y propagado el fuego.
“Son más fundamentales en el sentido de que son más fáciles de vincular con diferentes trastornos en el cerebro”, añadió.
La fuerza de agarre también podría usarse como una herramienta de detección temprana para la psicosis u otros tipos de enfermedad mental. “La fuerza de agarre y otras funciones motoras se evalúan fácilmente y se interpretan más fácilmente que las tareas complejas que se emplean con frecuencia para estudiar la psicosis”, dijo Moussa-Tooks.
“Nuestro trabajo está demostrando que estas métricas aparentemente simples pueden ayudarnos a comprender las alteraciones no solo en el sistema motor, sino también en los sistemas cerebrales complejos que dan lugar a los síntomas complejos que vemos en la psicosis”.
De un vistazo
Tratamientos
Los hallazgos sobre la fuerza de agarre identifican objetivos cerebrales potenciales para nuevos tratamientos para la psicosis. La estimulación magnética podría usarse para aumentar la conectividad cerebral y otro enfoque implicaría el ejercicio físico.
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