Luis Jorge Pérez Bolio: Se previene exclusivamente con vacunación

El sarampión es una enfermedad infectocontagiosa viral. Se considera un padecimiento infantil, pero se puede contraer a cualquier edad. Se confiere inmunidad permanente.

Todos los niños son susceptibles de contraer sarampión, excepto los menores de seis meses si la madre contrajo la enfermedad o fue vacunada, porque le confiere inmunidad natural trasplacentaria. Su contagio es directo, mediante secreciones nasofaríngeas que el enfermo expulsa al toser o estornudar. Una persona enferma puede contagiar el sarampión desde cinco días antes y hasta cinco días después de haber iniciado con la enfermedad.

En su evolución se consideran cuatro etapas:

El primer período, o de incubación, dura aproximadamente 11 días.

El segundo período o prodrómico, se inicia a los 10 a 12 días después del contagio, dura aproximadamente cuatro días y se caracteriza por fiebre, tos y conjuntivitis. En esta etapa, un signo muy importante son las manchas de Koplik, pequeños puntos blancos rodeados de un halo rojizo circular que se localizan en la cara interna de las mejillas.

El tercer período, o eruptivo, se caracteriza por la presencia de una erupción que se inicia detrás de las orejas, el tronco y los miembros inferiores. No produce comezón.

El cuarto período, de convalecencia o descamativo, se inicia cuatro o cinco días después de haberse iniciado la erupción.

Un punto muy importante es que el sarampión solo es prevenible mediante la vacunación, por lo cual invito a los padres de familia a que participen llevando a sus hijos a vacunar, aprovechando la campaña del sector salud federal y estatal que termina este sábado 3.

Consejo Mexicano de Certificación en Pediatría. Clínica Santa María.